El jueves 18 de julio en la Iglesia Catedral Castrense y con la presencia de los Altos mandos Institucionales y sus esposas, Generales, Invitados especiales Agregados de países en el ámbito castrense y esposas, Delegaciones del Ejército, Armada, Fuerza Aérea y Carabineros, Diáconos, Seminaristas y Personal del Obispado, se celebró el Día de la Espiritualidad de las Fuerzas Armadas y Carabineros de Chile.
La Eucaristía, presidida por el Obispo Castrense Monseñor Juan Barros M. y concelebrada por los sacerdotes- capellanes de Santiago y Valparaíso tuvo como intención principal dar gracias a Dios por la persona, misión y presencia de la Santísima Virgen María, Madre de Jesús y Madre nuestra, en el corazón y familias de los hombres y mujeres de armas que integran las cuatro Instituciones.
En la homilía Monseñor, además de enfatizar que es un querer de Dios la presencia de María Santísima en la historia de la Salvación; su generosidad a la vocación de Madre, Amparo, Consuelo, Guía, Modelo e Intercesora; que Chile y sus Fuerzas Armadas y Carabineros a lo largo de la historia Patria han querido ser hijos de Dios y de la Madre Santísima; que cada uno de nosotros la necesita como Madre, y Dios quiere continuar haciendo grandes maravillas para nosotros con Ella; que en la primera Encíclica del Papa Francisco nos recuerda que: “Quien cree ve; ve con una luz que ilumina todo el trayecto del camino, porque llega a nosotros desde Cristo resucitado…”, destacó: “Hermanas y hermanos en el Señor: la tan querida y admirada Beata Madre Teresa de Calcuta decía: “En nuestros días… la peor enfermedad no es la tuberculosis o la lepra, sino el sentirse indeseable, abandonado, privado de amor… Hay mucha gente que muere en el mundo por falta de un trozo de pan, pero hay muchos más que mueren por falta de un poco de amor. Que con la gracia de nuestro Señor Jesucristo, ‘Camino, Verdad y Vida’, con la permanente intercesión de la Santísima Virgen del Carmen, ‘nuestra Madre y Reina, Patrona y Generala’, por amor a vuestras familias y a la Patria, con la guía de vuestra Iglesia y vuestra generosa participación en ella, ¡animémonos todos a creer más, a amar más, a construir una comunidad nacional más fraterna, más justa, más cristiana!”
En la misma Eucaristía, nuestro Obispo Castrense impartió la Bendición y Envió a los jóvenes, dos por cada Institución, representantes de nuestro Obispado a participar de la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud que se realiza en Rio de Janeiro, Brasil, entre el 22 y 28 de Julio. Junto a los jóvenes los acompañan cuatro sacerdotes-capellanes, uno de cada Institución quienes también vivirán esta hermosa experiencia de fe junto a miles de jóvenes venidos de más de 190 países y junto a la persona del Papa Francisco.
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