La jornada, efectuada el miércoles 16 de agosto, se inició con una misa oficiada por el Obispo Castrense, Monseñor Santiago Silva Retamales, acompañado por capellanes de las diferentes ramas de las instituciones armadas.
En su homilía Monseñor Silva se refirió al mensaje del Papa Francisco en las Jornadas mundiales de Comunicaciones de mayo de 2017, respecto a la importancia de la labor de los comunicadores de generar una comunicación para el encuentro donde se difunda la Buena Noticia que es Jesús y buscar el aspecto positivo en los contenidos que se difundan. “Dios Padre, agregó, es el comunicador por excelencia. El nos dio a la Persona del Verbo Encarnado que nos transmite en persona la Buena Noticia, siendo El mismo esa Buena Noticia”.
Destacó, asimismo, la importancia fundamental de que el comunicador –a semejanza de Cristo- sepa entregar las noticias –aún las que no son buenas- miradas a través del lente del Evangelio. “Jesús, paradigma de comunicador, nos enseña a mirar la realidad, inclusive las situaciones dolorosas, a la luz de la Buena Noticia, conscientes del amor del Padre que se derrama sobre todos sus hijos y nos consuela haciéndonos saber que no estamos solos”.
La actividad concluyó con una convivencia entre los asistentes en la cual se les expuso la conformación del Departamento de Comunicaciones del Obispado Castrense, sus objetivos y la necesidad de un trabajo conjunto entre los diferentes profesionales para que la información sea difundida en cada uno de los medios con que se cuenta y así generar un intercambio de experiencias.
En la oportunidad, Jaime Coiro, periodista de la Conferencia Episcopal, efectuó una exposición sobre la tarea de los comunicadores y el rol que cumplen, sobre todo aquellos que trabajan difundiendo la labor de la Iglesia, en lo que comunican a la sociedad. “Comunicar, como dijo Monseñor, la Buena Noticia es fundamental para entregar el lado positivo de un hecho y así, lograr una comunicación para el encuentro”, afirmó.
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