Rito de Admisión al Diaconado Recibe SOM De La Armada De Chile

Punta Arenas, domingo 30 de junio de 2024.

El pasado 30 de junio, en una celebración eucarística en la Iglesia de la Armada en Punta Arenas, y con la presencia del Almirante Jorge Castillo Jefe de la III Zona Naval, su familia y comunidad castrense el obispo castrense de Chile, Monseñor Pedro Ossandón Buljevic, presidió el rito de admisión al diaconado permanente, del SOM de la Armada Fernando Venegas acompañado junto a su esposa Ivonne, sus hijos Ivonne y Fernando, quien a partir de ahora acompañará en diferentes tareas que le encomendará su Capellán de la Armada, P. José Bravo, y el P. Marcos Buvinic, Director de la Escuela del Diaconado Permanente de la Diócesis de Punta Arenas

Monseñor Ossandón dijo en su homilía:

“Es una alegría para la Iglesia, y de manera especial para el Obispado Castrense, y cómo no estar alegres en la Armada de Chile, cuando uno de sus miembros es llamado por Dios para un Servicio muy especial, como lo será el servicio del Altar y a sus hermanos. Por eso, cuando Dios nos elige para una misión particular, es para que colaboremos con la dimensión misionera de la Iglesia, por eso ahora que se está preparando para el diaconado, es para desde allí acrecentar la obra misionera de la Iglesia y particularmente el diaconado vivir esta misión de servicio que tiene que vivir cada cristiano, sino ayudar a que toda la comunidad despierte esta vocación de servicio, como Jesús que no vino a ser servido sino a servir y hasta dar su propia vida por los demás”.

El rito de admisión tiene como finalidad que los aspirantes al Diaconado o al Presbiterado manifiesten públicamente su voluntad de ofrecerse a Dios y a la Iglesia, para ejercer el Orden sagrado.

Por su parte, la Iglesia al aceptar esta entrega, lo elige y lo llama, para que se prepare a recibir el Orden sagrado, y así lo agrega ritualmente a los candidatos al Diaconado o al Presbiterado.

El rito de admisión se celebra cuando consta que el propósito de los aspirantes, corroborado con las dotes necesarias, ha llegado ya a una suficiente madurez.

El rito de admisión lo celebra el Obispo o el Superior mayor de los Institutos clericales religiosos, según la naturaleza de los aspirantes.

El rito de admisión puede hacerse cualquier día, especialmente en los días de fiesta, en una iglesia o en otro lugar adecuado, ya sea dentro de la Misa, ya sea en una celebración de la Palabra de Dios.